domingo, 21 de febrero de 2010

desde la ventana

En su terraza, dos sillas blancas de enea y un macetero enorme lleno de buganvillas rojas que salpicaban de vida y de alegría el fondo azul de la pared, y se esparcían caprichosas en pétalos lánguidos por el suelo. A Inés le gustaba salir a esa terraza y sentarse mirando al mar, le gustaba mecerse en la silla a modo de mecedora infantil, y sentir el ritmo de un forzado balanceo de delante hacía atrás y de nuevo de detrás hacía adelante, que era lo más parecido que recordaba a volver a su mundo de niña, cuando se acurrucaba en los brazos de su madre y ésta la besaba y la mecía y le cantaba cancioncillas antiguas, heredadas en mecidas y mecidas de abuelas a madres y de madres a hijas.

Miraba al mar meciéndose y sintiendo la brisa cálida de la tarde, el griterío a lo lejos de los niños en la playa, y de cuando en cuando, el vuelo de gaviotas buscando alimento al atardecer. Así, con cada balanceo, examinaba a veces su vida, mientras inevitablemente miraba de reojo aquella otra silla vacía que, junto a la suya, eran indiscutiblemente las reinas de la terraza.

Durante años había anhelado que esa silla tuviera dueño, que coqueteara mimosa junto a la suya, pero los hombres habían pasado a su lado sin detenerse y ella no había conocido a ninguno a quien detener, así que aquella silla vacía ganaba solidez de la misma manera que mermaban sus probabilidades de encontrar pareja, cosa que, con el paso de los años, -!quien lo hubiera dicho!-, empezaba un poco a traerle sin cuidado. Ahora, en la madurez de los cincuenta, su mundo parecía que empezaba a llenarse de otras preguntas, de otras diferentes a aquella tan reiterada del ¿qué hacer con el amor que se queda sin dueño?.

No sabía explicarlo, no sabía ni como ni porqué, pero lo cierto es que sentía que la inundaban nuevos sentimientos, y hasta vivía de otra manera sus sueños... serena, plena, intensa, como ese horizonte azul enmarcado desde su terraza que acompañaba una puesta de sol espléndida, un paisaje, que la fascinaba y la envolvía en luz y en paz, un paisaje alucinante pese a verlo a diario, y que sin embargo, le producía sensaciones diferentes cada vez, cada momento, vibraciones que la sorprendían y la maravillaban como algo mágico, como si de un cuento de Tolkien se tratase.
!Podría pasarse la vida mirando al mar desde la ventana, como dentro de un cuadro inalterable de Dalí!, y cuando la luz de la tarde plateaba las olas, y la luna se alzaba majestuosa en un firmamento cuajado a rebosar de chispeantes estrellas, cerraba los ojos y sentada sola en su silla, canturreaba despacito aquella canción de Serrat que siempre había llevado pegada en el alma... hoy puede ser un gran día planteatelo así, aprovecharlo o que pase de largo depende en parte de tí... no consientas que se esfume, asómate y consume la vida a granel, hoy puede ser un gran día, duro con él...

Mientras, los ruidos de la playa iban cesando y la ciudad se inundaba de electricidad, de duendes, de estrellas, de una luna siempre misteriosa, de amantes... Inés, envuelta en su mundo, con los ojos cerrados, seguía dejándose acariciar por la brisa de la noche hasta que aparecían las sombras que invitaban al descanso... ¿qué hacer con el amor que se queda sin dueño? se preguntaba su corazón, su cabeza sin embargo, seguía canturreando... no dosifiques los placeres si puedes derrochalos... que todo cuanto te rodea lo han puesto para tí, no lo mires desde la ventana y siéntate al festín... hoy puede ser un gran día y mañana también...

34 comentarios:

  1. Hija mía!!!... pero si a los 50 estamos de rechupete... jajajajaja... hañbiéndolas, que haylas... señoronas estupendonas, apretaicas ellas y chisporroteantes... Lo mismo que le hace falta es un poquico de decisión y tirar p´lante

    Mira tú, que me ha recordado unos versicos de un poemica mío:

    ...
    dame vida tu carmín,
    que pinte tu sonrisa gris
    del color de la amapola
    ...

    de un poema mío que lo publiqué en fecha 02/jul/2008

    Besicos

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  2. GUILLE, millonazo de gracias por el comentario, el prime, ya ves... que sí, chiquillo, que sí, que a los cincuenta se está de rechupete, y a los sesenta y a los setenta !que caramba!, pero a mi Inés, el amor se le había quedado sin dueño, y eso, irremisiblemente la ensimismaba, la retraía, la hacía sentirse distinta a las demás en menos, lo que se dice arrastraba un mal de amores, arrastraba el peso de un vacío de amor que te marca y te señala, a lo drama lorquiano, un mal de amores que te persigue aunque hayas aprendido a vivir sin él y a superarlo, sin que tenga nada que ver la edad

    Un besote, ya sabes, uno bien gordísimo.

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  3. la imagen de la silla vacía es muy triste. Grafica excelentemente la soledad y las ganas de salir de ella. Ojalá esa mujer logre no dejarse atrapar por el sinsabor de quienes pierden la esperanza. Ojalá se dé cuenta que está viva y que, efectivamente, cada día puede ser un gran día.


    Un abrazo!

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  4. A veces es mejor estar solo que mal acompañado.
    Un beso y feliz día.

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  5. Bueno, si la muchacha está sola y está bien, pues eso que sale ganando, no? Si no ha conocido a ningún hombre que realmente valga la pena, pues que no desespere. Ya llegará, y si no llega, pues no pasa ná, no? Que con 50 añillos está en su mejor momento, seguro.
    Se trata de disfrutar cada uno de los días como más le apetezca. Justo eso de "hoy puede ser un gran día y mañana tb".


    Besos, niña!

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  6. apm,que la vida está llena de alegrías a cada segundo,que con una mirada se puede uno comer al mundo,que si una compañía no es lo más conveniente para Inés,¡¡¡que carambas¡¡¡
    que mejor lo disfrute solo.

    te invito a este blog:

    espaciosculturales-marucha.blogspot.com

    ahi vacio fotros y videos cortitos,de cuando voy a los eventos culturales de esta zona.

    me agradaría que me visitars ahí,y saber tu opinión,además,varios de los intelectuales y artistas visitan el blog,y les agrada leer comentarios,ya sabes,el ego.

    pero que haríamos sin el amor propio ???

    Cristo dijo ama a los demás como a tí mismo.

    ¿ te amas ?

    yo te amo, te quiero mucho, tus lineas cuando las veo,me inundan el alma,y me siento tan acompañada,tan completa,tan saber que en un punto del universo,tu y o nos hemos encontrado.

    tu y yo en este espacio,tiempo y lugar hemos convergido.


    recibe un abrazo,fuerte,fuerte,que el tiempo no está para tibiezas ni remilgos.

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  7. apm, has sabido plasmar de maravilla la imagen de una mujer que ve la vida pasar, una espectadora de la vida.
    Tendremos que decirle a Inés,que el amor que no se da se pierde y que nunca es tarde para compartir sentimientos.

    Abrazos con cariño.

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  8. NEO, millonazo de gracias por el comentario reina, sí, tienes toda la razón, la foto de la entrada es premonitoria, absolutamente gráfica, una silla vacía con un punto triste, matizado quizá por el color azul intenso, es justo eso, expresar la soledad de un amor que se queda sin dueño, un amor que has tenido guardado y listo para ser entregado, que sigue estando en tí, pero ahora ves que se muere lánguidamente sin solución, y no obstante ese matiz pesaroso, sientes ganas de superarlo, deseo de salir adelante sola sin importarte ya esa búsqueda del amor que te ha perseguido durante tantos años... en el fondo, es como una liberación de un sino que la ha tenido marcada, por eso canturrea una canción que si otrora le evocaba la más pura realidad, ahora le supone un estímulo

    Un besote, ya sabes, supergordísimo

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  9. RAMPY, muchísimas gracias por el comentario... no solo a veces es mucho mejor estar solo que mal acompañado, siempre, siempre es mejor solo que mal acompañado !claro que sí!

    Un besote, uno de los muy gordos

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  10. LOU, muchisimas gracias por el comentario, corazón... así es, es aquello del vive el momento, tu momento, con tus circunstancias, y disfruta lo más posible de él, porque hoy puede ser un gran día y mañana también, y que lo sea es cosa tuya "aprovecharlo o que pase de largo depende en parte de tí" -como canta Serrat-, a Inés le pesa como una losa ese amor contenido durante tantos años y que se ha quedado sin dueño, ahora sin embargo, se está liberando como de ese estigma sin importarle su soledad

    Un besote, por supuestisimo, uno de los gordos

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  11. MARUCHA, mil gracias por tu comentario, de verdad... sí, Inés se está liberando de esa búsqueda de un amor que se le ha quedado sin dueño, y que como una losa, -al estilo de una antigua tragedia griega- la ha perseguido desde siempre, ahora sin embargo, mira y siente la vida de otra manera, pese a su rotunda soledad que ya no le afecta.
    Entraré en ese blog de espacios culturales y te comentaré, claro que sí

    Un besote, como siempre, de los gordos

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  12. ALHENA, millonazo de gracias por el comentario, millonazo... así es, es justo la mujer que ve pasar la vida desde su ventana, la espectadora pasiva, que ahora, empieza a liberarse de esa carga del amor que se le ha quedado sin dueño, que efectivamente, se pierde, pero que nunca es tarde, por eso hoy puede ser un gran día y mañana también.

    Un besote guapísima, uno de los gordísimos

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  13. Aquí bien sentado,he llegado a mecerme, no sé muy bien si por el vaivén de la silla o de las olas que con su ir y venir me han hipnotizado,al igual que el texto,la historia y por qué no, algunos recuerdos.
    Un relato de libro.
    Un beso

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  14. Tu publicación me ha recordado una canción de por aquí..."le dijeron que olvidara todo, que una cinta al pelo, que otro amor quizá..."

    Ha mirado pasar la vida desde esa ventana, sin atreverse a soltar amarras y volar, muy bello lo que has compartido, me encantan tus palabras, espero no ser inoportuna,
    te dejo un gran abrazo desde México.

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  15. Dicen que para el amor nunca es tarde, y que no tiene edad! Pero más importante que llegue o no alguién a la vida de Inés, es sentirla plena, contenta, satisfecha de su vida y con entusiasmo de vivir!
    Besitos,

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  16. Hola guapa, muy bonito tu texto, tienes ingenio
    te felicito, un placer pasar por tu casa.
    feliz semana.
    un beso.

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  17. apm:Es extraño como trasvasa una la vida, yo amé mucho como mujer,de hecho tengo muchos poemas me lo recuerdan.
    Lo raro es que ahora trato de pensar cuando fue que olvidé ese tipo de amor.
    Con mi cariño:Doña Ku

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  18. MIGUEL, muchísimas gracias por el comentario, la verdad es que esa persona que ve pasar la vida desde una ventana, recluida en su mundo, sin atreverse a salir de él para que no la hieran, para no sufrir, pero también -y por lo mismo- negándose la posibilidad de poder gozar, existe de veras, yo personalmente conozco a una, y, supongo que habrá más. Supongo que habrá más que se pregunten que hacer con el amor que se queda sin dueño... la canción de Serrat es certera: hoy puede ser un gran día, siempre hay que plantearselo así, y, aprovecharlo o que pase de largo, siempre depende de uno mismo ¿verdad?

    Un besote, uno de esos gordísimos

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  19. CANTO EN FLOR, muchísimas gracias por el comentario, de veras... me ha encantado que me digas que el relato te ha recordado a una de esas canciones mexicanas maravillosas, con letras de una belleza descomunal, !qué letras!, y, ¿como vas a ser inoportuna, mujer?... para nada, en absoluto, todo lo contrario: eres bienvenidísima a este blog compartido. Bienvenidísima

    Un besote, uno enormísimo

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  20. SOÑADORA, millonazo de gracias por el comentario... así es, para el amor no hay edad y nunca es tarde para enamorarse !por supuesto!, y desde luego, estoy completamente de acuerdo contigo: mucho más importante para Inés es que ella se sienta bien, feliz y satisfecha consigo misma -aún cuando sóla-, que cavilar y cavilar esperando a que llegue ese hombre a su vida para el que ha guardado todo su amor. Lo primero es sentirse bien una consigo misma, quererse, sentirse plena y feliz, luego, ya después de ésto -o quizá por ésto- viene lo demás

    Un besote, ya sabes, uno de esos gordísimo

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  21. RMC, más que millonazo de gracias por tu comentario, más... de veras, muchísimas gracias por tus palabras, sobre todo viniendo de vos, todo un poeta como la copa de un pino... y maravilloso también cuando tus letras son prosas.

    Un besote, como siempre, de los gordos

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  22. DORA, muchísimas gracias por el comentario... !vamos doña Ku, no me puedo creer que se te olvidara nada de ésto!, por aquí (en Andalucía) cuando alguien se olvida de algo se le da a comer rabitos de pasas, -las pasas son uvas secas, están extremadamente dulces, y las de la Axarquía de Málaga son extraordinarias-. Mi madre me ha dado a mí a comer tantísimas pasas, que si el refranillo es cierto, no se me tendría que olvidar nada, pero que nada.

    Un besote, uno gordísimo llenito a rebosar de cariño

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  23. Pues me rechifla el atardecer de Irene y esa luz que maravillosamente describes Alice. Estar en paz con uno mismo es casi una ilusión ... dudo mucho que con un corazón sensible como el suyo, esa silla tarde mucho en ocuparse pero lo mejor de todo es que no tiene prisa ... disfruta del momento de su canturreo de los placeres en sus cinco sentidos mientras otras vagan ciegos por la vida!

    Si me deja nada me gustaría más que acompañarla en su terracita y cerrar los ojos y sentir el calorcito del atardecer ... debe haber mucha paz, lo siento ... hmmmm. Gracias amiga por regalarme este momento! Muacc

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  24. Que buen post, me gusto mucho
    Lindo blog, besos.
    Te sigo...

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  25. ¡Qué bonito, apm! Y te digo como Guille, a los 50 estamos de rechupete, jajajajaaja

    Me ha encantado el relato, tan bien redactado que me he sentido dentro de él, tu descripción es impecable, niña, que hasta los sentimientos se ven...

    Besazos, bien gordotes :)

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  26. "¿qué hacer con el amor que se queda sin dueño?".
    Pues quedarnoslo nosotros, que de eso se trata...
    Primero enamorarme de mì, luego salir al mundo
    Gracias apm. Gracias por compartir y hacer que pensemos sobre el amor y la soledad, la Vida.
    Abrazo de luz, Mirta

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  27. MELA, muchísimas gracias por el comentario, corazón, desde luego tienes toda la razón, estar en paz con una misma es lo más de lo más, sentirse bien, vivir el momento sin prisas, saborear la vida... pero interfiriendo en ella, eh!

    Un besote, por supuestisimo, uno de los gordos

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  28. ELYAM, muchísimas gracias Ely, pero, como este blog es compartido, la encantada también soy yo.

    Un besote reina, uno de esos bien gorditos

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  29. LILI, millonazo de gracias por el comentario... !pues claro que sí, a los cincuenta está uno pa comerse enterito, y requetechupearse!, !anda que no!. Ya sabes Lili, la encantada de que te haya gustado el relato también soy yo, desde luego.

    Un besote que, como ya te podrás suponer, es de los bien gordísimos

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  30. MIRTA, mil gracias por el comentario... tienes toda la razón del mundo: el amor que se te queda sin dueño te lo tienes que quedar, y derrocharlo a manos llenas en lo que te rodea, en quienes te quieren... en vivir, vivir con mayúsculas,

    Un besote, uno de esos enormísimos

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  31. A través de tus palabras me meto dentro de ese escenario, en la piel y en el pensamient de Inés. Creo que el detalle de la silla vacía, es un buen elemento que has sabido explotar para decirnos hablarnos del "amor sin dueño", así, con esa rotundidad.

    Otra de las bondades de tu texto está el enlace que haces entre el paso del tiempo transcurrido desde que se asoma (la tarde) hasta que anochece (cuando se encienden las luces y salen los duendes), y, la propia vida de la protagonista: a ella se la aproxima "la noche" pero esa noche lleva luces y de fondo la canción de Serrat, nos dice que "hoy puede ser un gran día". Por tanto dejas esa gotita de amabilidad y optimismo en los finales que son muy necesarios hoy día.

    En cuanto a esa pregunta que puede inquietar de manera obsesiva a los solitarios en general, a los cincuenta: "¿qué hacer con el amor que se queda sin dueño?., se podría transformar en: "Ande yo caliente ríase a la gente" al llegar a los sesenta.

    Me ha gustado.

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  32. MANEL, buen comentario corazón, millonazo de gracias... ja,ja,ja, !pues o bien tienes telepatía o parece que fueras capaz de verme como por un agujerito mágico!, te lo aseguro, lo de la silla es tal que así, ni te imaginas lo que me curré el encontrar por google esa silla, había cientos de fotos, pero yo necesitaba una silla que por si sola lo dijera todo, la silla de un amor sin dueño, efectivamente. Un amor sin dueño que te tiene que doler de alguna manera, como el destino de una tragedia griega, pero al que quieres darle una opción, si quiera sea la de liberarte de esa losa, si has sido una espectadora de la vida, hoy puede ser un gran día y que cambie eso, y si no, mañana también.
    ¿Y que es eso de transformar el amor que se queda sin dueño de los cincuenta por el ande yo caliente y riase la gente a los sesenta?, no, no, eso vamos a dejarlo para cuando tengamos ochenta años o noventa, a los cincuenta y a los sesenta, está uno para comérselo -como me han dicho varios en su comentario- y tienen razón.
    Me ha encantao el tuyo, un comentario en el que me has pillao, de veras, calaíta me tienes.

    Un besote, por supuestisimo, de los gordísimos

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  33. ¡Estupeda puesta en escena!: Inés sentada en su silla, junto a la que está vacía, en su balcón frente al mar; Inés espectadora desde su palco de la gran obra de teatro que se representa frente a ella. Inés compensando la falta de compañía a través de saborear las maravillas que la vida le trae hasta sus ojos en ese espectáculo diario de sesión contínua.
    Inés, optimista acérrima que siempre ha optado por adquirir dos localidades aunque a sabiendas de que solo se ocupará una.
    Tierna Inés, encantadora mujer.

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  34. ANDRES, muchísimas gracias corazón... tengo que empezar por decirte que me ha encantado que me hayas hecho un comentario en mi primera entrada, esa que hice cuando creé el blog, la del monólogo y el harakiri, la acabo de ver... !me ha encantao leerte y tenerte ahí, de veras!.
    En cuanto a ésta, -que también la acabo de ver-, igualmente tengo que decirte que me ha encantao todo el comentario que has hecho !vaya que sí!, especialmente por ese símil del teatro -para una teatrera como yo, es lo más de lo más-, y estoy de acuerdo contigo en que desde su balcón, como en un gran palco, Inés ve pasar la vida, pero no deja de ser solo una espectadora, no sale a escena, y, sí, ella piensa que hoy puede ser un gran día para cambiar el rol, y si no, mañana también, pero no ha adquirido dos localidades a sabiendas de que solo se ocupará una, deseaba y esperaba que la localidad vacía se ocupase, y ese vacío la ha venido persiguiendo durante mucho tiempo, demasiado quizás, es un vacío amago, que pesa.
    Completamente de acuerdo en que es una tierna y encantadora mujer...

    Un besote enormísimo, ya sabes, de esos bien gordos y sonoros

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