Nos quedamos en que, aún no se había digerido la sorpresiva noticia de la dimisión absolutamente inesperada de Mou, cuando Pep Guardiola emite un comunicado de prensa...
El comunicado de prensa de Pep Guardiola era breve, solo recogía su irrevocable dimisión y daba las gracias al equipo por el tiempo en que habían estado unidos profesionalmente, y a la afición por su siempre incondicional apoyo.
La noticia, en un principio no fue tenida ni siquiera por veraz, ¿qué era aquello de que el Barça se quedaba también sin su entrenador?, es que no cabía en cabeza humana encima otra dimisión, como si ya no fuera bastante con la dimisión de Mourihno. Sin embargo, apenas una hora del comunicado, la noticia de la dimisión de Pep se asentó, sobretodo, al conocerse que el propio Pep daría una rueda de prensa en la sede del club... de nuevo, el sensacionalismo y la espectación recorrieron televisiones y cadenas de radio, en espacios tanto deportivos como no deportivos.
La dimisión de Pep, no solo que sorprendió tanto o más que la de Mou, sino que algo empezó a respirarse entre los profesionales, algo que tenía tintes de cataclismo. Los salones del Barça eran un hervidero, repletos como nunca de cámaras y periodistas; y cuando finalmente apareció Pep con el presidente del club Sandro Rosell, cámaras y micrófonos literalmente se avalanzaron hacía ambos, acribillándolos al unísono con un
- ¿Tiene ésto algo que ver con la dimisión ayer de Mou?
Como pudo, agobiado entre tanto micrófono rozándole la boca, el técnico, educado y sobrio, contestó que no, que nada que ver, que había presentado su dimisión por motivos personales.
No dió más explicaciones, agradeció a todos su comprensión, le deseó lo mejor al Barça, tanto a directivos como a jugadores, y se marchó.
El revuelo fue monumental, inmediatamente las televisiones dieron avances comunicando la noticia, y en las tertulias de todo tipo, no se daba crédito a tan significativas dimisiones en menos de apenas veinticuatro horas. Pero como si de las fichas de un dominó se tratase, esas que si se cae la primera va arrollando a las siguientes, que indefectiblemente se caen una tras otra, los comunicados de dimisiones no paraban de llegar a las redacciones de los periódicos, !era de locos!, a cada hora había más y más entrenadores dimitidos: Bielsa, Jiménez, Unai Emery, Michel, Pepe Mel, Pellegrini... y la lista crecía por momentos, absolutamente una locura surrealista.
La pregunta, era pues de lo más inevitable: ¿Dios mío, qué está pasando?, ¿qué era lo que estaba sucediendo para que los entrenadores de fútbol dimitieran uno tras otro?, nadie podía entenderlo, nadie, era de locos, sin duda todo aquello era de locos.
A las dos de la madrugada, no quedaba en España ni en primera ni en segunda división un entrenador en su puesto, todos, absolutamente todos habían dimitido.
Las rotativas del El País, ABC, Marca, As... echaban chispas intentando recoger toda la información y explicando, cómo podían, las razones y consecuencias que arrastraba tanta dimisión. Los redactores jefe no paraban de darle vueltas al tema buscando el adecuado titular a sus portadas, y en ésto, el modesto semanario de Villarriba de Abajo, lo calcó: a doble tinta y en letras muy grandes, solo se leía en la portada
Es así, el fútbol es así
¿pero porqué?
jajajaja... cuantas veces no habremos oido lo del fútbol es así, y no digamos, los porqué del entrenador del RM; enfín, que sea como fuere -si porque el fútbol lo es (así, claro), o por arcanos porqués, que lo mismo haberlos haylos-, lo que sí que deseo, es que al menos os hayais divertido con el relato.
Mil besitos gordotes.