!Dios mío era de locos!, !absolutamente de locos, sí, de locos!, me lo había repetido a mí misma una y otra vez, mil veces por lo menos, !de locos!, pero nada, no por eso, dejaba de andar de trajín con el encuentro, con los nervios totalmente aceleraos y esa sensación de pánico, como de vivir y no vivir a un tiempo...
y es que desde luego era de locos, absolutamente de locos esa cena con ellos en el Oriza... !madre mía de mi alma, qué locura!, todo el día agobiadísima por no saber qué decir ni qué hacer, por atascarme con mi inglés cortito y chapucerillo, por si ponerme este vestido o aquel, o el pelo largo como de costumbre o si un moño bajo femenino y favorecedor... ¿y que íbamos a pedir en el Oriza?, ¿ellos comerían?, !qué locura!, y si al menos alguno fuera Rimbaud o Baudelaire, quizá podría hablarles con soltura y fluidez, al fin y al cabo estoy en tercero de francés, pero no, en inglés, y ellos... aunque claro, bien mirado y después de todo, era una suerte, un honor, un milagro, una locura sobrenatural... francamente, ya no se qué era, la verdad, pero desde luego, no se cena todos los días con dos escritores y poetas, que estén muertos, a estas alturas ya me parece que es lo de menos, y, ni que decir tiene, lo más exitante, no cabía duda.
Al entrar en el restaurante, así, medio perpleja, medio excitada, medio muerta de miedo y de curiosidad, medio viviendo sin vivir en mi como Santa Teresa, de inmediato los vi, charlando los dos animadamente en la barra.
Como comprenderéis, miré y miré una y otra vez aquí y allá, a un lado y a otro, pero nada parecía salir de la rutinaria normalidad de un restaurante... ellos estaban allí, y sorpresivamente todo el mundo se comportaba como si tal cosa !manda carallo!, yo muerta de angustia, de nervios, de perplejidad, en un sinvivir y sin llegarme la ropita al cuerpo, y estos dos sin embargo, allí, charlando en la barra como si nada... !qué locura!, titubeante, me dispuse a ir hacía ellos ensayando por lo bajini un good night my dear poets, pero no había dado siquiera un paso, cuando ellos, al quite, captaron la intención y vinieron a mi encuentro... sin palabras, en el centro del hall, los tres nos fundimos en un abrazo cálido, atemporal, hermoso... la cena, prometía.
Ostras, qué bueno! Me ha encantado!
ResponderEliminarCasi ná, nena. Una cena con estas criaturas tenía que ser la leche en pepitoria. Otra vez me avisas y te acompaño, vale?
Si yo quedo a cenar con Elvis y Michael Jackson, no te preocupes, que te aviso tb. :)
Besos, guapa!
jajjajaa vaya delirio quizás nacido de algún original sueño que has tenido mujer! jejeje...nos has sorprendido con la originalidad de tu relato metiéndonos en un rincón de ese restaurante con muchas ganas de espiar lo que se está por dar!jajjajaa
ResponderEliminarUn abrazo!
Ya lo creo que esa cena promete Apm, lujazo de acompañantes! jejeje
ResponderEliminarBesitos,
BUENO....QUE LOS SUEÑOS SUEÑOS SON, YA LO DIJO ALGUIEN ANTES, PERO, PAVADA DE SUEÑO.
ResponderEliminarMENOS MAL QUE ERA EN EL RESTAURANTE, Y NO TUVISTE QUE PREPARA CENA PARA TRES. QUE HUBIERAS PREPARADO?
ABRAZOS APM
LOU, muchísimas gracias por el comentario corazón, desde luego que sí, que la leche en pepitoria como tu dices... ja,ja,ja, quedamos en eso, ya nos avisamos para la cenita con Elvis, eh!.
ResponderEliminarUn besote giganteeeeeeeee
NEO, millonazo de gracias por el comentario, reina... pues efectivamente, un delirio !de locos! !de locos!, ya lo decía yo.
ResponderEliminarUn besote, ya sabes, bien gordito y muy sonoro
SOÑADORA, millonazo de gracias por el comentario, sí, sí, tienes razón... con semejantes acompañantes, ¿como no va a prometer la cena?
ResponderEliminarUn besote, por supuestisimo, gordito y sonoro
ABU, muchísimas gracias por el comentario que, me ha encantao... ja,ja,ja, así que el restaurante me ha salvado de una buena, ja,ja,ja aunque a mí, no me disgusta cocinar... pero vamos, ni idea de lo que prepararía de cena si hubiera sido en casa, pero me da a mí que Oscar Wilde y Edgar Allan Poe se hubieran chupado los dedos con un buen salmorejo y un bacalao al pil pil, y de postre, unos canutillos de natillas con helado de turrón... y claro, acompañado todo de buenos vinitos, que en España, haberlos haylos buenísimos.
ResponderEliminarUn besote enormísimo abu, ya sabes, bien a rebosar de cariño.
Joder que cena mas cultural...Mu bueno mi queridisima amiga..un abrazo...
ResponderEliminarUn encuentro muy singular, un relato muy original, vivaz, sorprendente y sorpresivo con un tierno y cálido final...
ResponderEliminarY de sobremesa?
Te dejo mi abrazo y beso de domingo, que te dure toda la semana y más.
Bonsoir apm,
ResponderEliminarMerci beaucoup pour vos gentils commentaires!
Je sais que la fêtes des mères est déjà passée chez vous, mais si vous êtes une heureuse maman,
je vous souhaite avec un peu de retard une joyeuse fête des mamans!!
Très belle soirée et à bientôt
Y qué pidieron antes de cenar, un güiski y una fregona???... jajajaja... :) ... No, en serio. un relato espectante. Menuda cena, eh?
ResponderEliminarBesicos.
Que bueno cuando la gente es tan simple que no hace falta protocolos. Yo soy muy cortada para estas cosas y creeme linda, la gente importante que he conocido, no me lo ha puesto fácil.
ResponderEliminarun besito.
HOLA PASO A SALUDARTE, PERO VOLVERE A LEER TODO LO QUE ME ESTOY PERDIENDO, TRANQUILQMENTE Y CON TIEMPO, CUANDO PUEDA.
ResponderEliminarSIGO SIN PODER COMUNICARME, EL PROBLEMA ES DE QUE NO QIERE REFORMATEAR EL CD ORIGINAL DE WINDOWS Y ESTAMOS MIRANDO A VER POR QUE, ESPERO PRONTO VISITAROS A TODOS COMO SIEMPRE.
MUCHAS GRACIAS POR VISITARME AÚN QUE YO NO PUEDA DE MOMENTO CORRESPONDER, BIEN QUE LO SIENTO, DEJO ESTE MENSAJE A TODOS IGUAL, PUES NO TENGO MUCHO TIEMPO, Y LE DEVUELVO EL ORDENADOR A MI HIJO QUE LO NECESITA MÁS QUE YO .
UN ABRAZO.
AMBAR.
Pero qué buenas amistades tienes amiga, y encima no te privas de nada eh,en el Oriza,no en una tasquita del barrio de Santa Cruz ja ja.
ResponderEliminarMe ha encantado,tu relato,tus amigos...
Con Oscar no hubieras tenido problema con el idioma, sus últimos días los pasó en París y Edgar seguro que terminó alguna de sus frases.
"¿Hasta nuestro último empeño
es sólo un sueño dentro de un sueño?"
Un abrazo
Menuda compañia mujer! Yo no se si cenaría pero seguro no me perdería la oportunidad de compartir su mesa!
ResponderEliminarGracias por compartir "tanta locura"...
Abrazote de luz muy fuerte, Mirta
Menuda cena, era para decirles que ellos en su época si que se dieron un "Walk on the WILDE side..." je je
ResponderEliminarUna ocurrencia muy original y de calidad,reunir a estos personajes en una cena. Al emplear la primera persona transmites bien al lector lo que se siente cuando se es anfitrión y todo, parece una obligación, tiene que salir bien.
El detalle del Oriza es una muestra de distinción y hospitalidad. Además tiene el aspecto de los restaurantes que ellos debieron frecuentar en sus días. Al final dejas abierta la puerta, a una interpretación del lector o tal vez a la continuación...
Un besote gordo
PS: Gracias por tu comentario sobre el nuevo look de mi blog.
JOSE, muchísimas gracias por el comentario corazón, sí, sí, no cabe duda que una cena de lo más cultural... y psicodélica además ¿no?
ResponderEliminarUn abrazote gordísimo con un beso gordísisimo también para ti.
CANTO en FLOR, millonazo de gracias por el comentario, de veras, muchísimas gracias ¿de sobremesa?... pues imagínate, una memorabilisima velada hablando -y sobre todo escuchando- sobre el retrato de Dorian Gray, el crimen de lord Arthur Saville, el fantasma de Canterville, sobre el príncipe feliz, el gigante egoísta, sobre los crímenes de la calle Morgue, el pozo y el péndulo, la carta robada, el entierro prematuro, el gato negro... por supuesto de poesía.... !tantísimo de que hablar que yo creo que nos dan la una, las dos, las tres... como la canción del Sabina!... vamos, que seguro que los del Oriza ya hasta con mosqueo y preocupación de qué es lo que nos habrían puesto en la comida para no parar de hablar y hablar... ja,ja,ja, !y a ver como explicas que los comensales son de mil ochocientos y pico!... y comiendo jamoncito y vinito español... ja,ja,ja.
ResponderEliminarMe ha encantao tu comentario Canto, muy pero que muy salado.
Un besote enormísimoooooooo
KENZA, bonsoir... ici à Seville, où il a vécu, a déjà passé la fête des meres et je l´ai célèbré avec ma famille. Je dois vous dire, chere Kenza oui, que je suis une maman heureuse, j´ai deux filles, l´ainée, elle a seize ans, et le plus bas est de quatorze... mes deux grands amours!!!
ResponderEliminarVotre nouveau post avec toutes magnifiques tableaux de mères et de fils et filles, sont un délice à regarder et parfaitement exprimer ce sentiment intense de la maternité... puis allez dans votre blog et laisser un commentaire.
Un bisse et bonne soirée
GUILLE, muchísimas gracias por el comentario... ja,ja,ja, pues yo creo que, por empatía con la ciudad en la barra se estaban tomando unas cervecitas
ResponderEliminarGUILLE, el ordenata -como tu le llamas- no me ha dejao continuar con el comentario... pues, yo te decía que, unas cervecitas con un poquito de jamón de Jabugo y un platito de taquitos de adobo ja,ja,ja,
ResponderEliminarUn besote, ya sabes, de los gordos y sonoros
ZAYI, millonazo de gracias por el comentario, reina... pues éstos, desde luego son importantes !importantísimos!, pero debe ser eso de que como están muertos, todo fluye de otra manera ¿no?, simple y llanamente y en otra dimensión... ja,ja,ja.
ResponderEliminarUn besote gordísimo, ya sabes, de los grandotes y sonoros
AMBAR... vaya, espero que en un pis pas, -superprontísimo-, se solucione lo de tu ordenador, ya sabes que la informática de cuando en cuando nos juega malas pasadas !paciencia!
ResponderEliminarDos besotes enormísimos, uno para tu hijo y otro para ti.
MIGUEL, millonazo de gracias por tu comentario, corazón... me ha encantao... ja,ja,ja, bueno Miguel, no creas, las tasquitas del barrio de Santa Cruz son maravillosas, rebosan encanto, -como el barrio- que vamos, yo creo que a estos dos las tasquitas les hubieran encantao... y, o con mi inglés chapucero estilo indio, o en francés o por señas !después de quedar a cenar como si tal cosa, no vamos a quedarnos sin hablar... hasta por los codos....como sea, !anda que no! ja,ja,ja.
ResponderEliminarMe ha encantao tu comentario
Un besote, de los gorditos y sonorísimos
MIRTA, muchísimas gracias por tu comentario, reina... pero, ¿como que no sabes si cenarías?, por la emoción te refieres ¿no?, pero vamos Mirta, que ya que estas en un restaurante tan bueno y con esa compañía, se cena y se charla y se sobremesea y que nos den las tantonas charlando y charlando... !y a ver como explicas al día siguiente en la oficina que estas muerta de sueño porque estuviste charlando y compartiendo mesa y mantel con Oscar Wilde y Edgar Allan Poe!... ja,ja,ja
ResponderEliminarUn besote, ya sabes gordísimooooooooooooooo
MANEL, millonazo de gracias por el comentario, corazón... !sí, menuda cena! ja,ja,ja, y mira, no se me había ocurrido el tema canción ni tampoco el paseo, pero desde luego, a la letra de Lou Reed de dar un paseo por el lado salvaje, se hubieran apuntao los dos, vale vale, Oscar como que de cabeza, pero Edgar no le hubiera ido a la zaga... y yo también, !ya que estamos!... ja,ja,ja,ja.
ResponderEliminarEn cuanto a dejarlo ahí o continuar, pues, no sé, no sé Manel... cuando estaba escribiendo éste relato, me reía continuamente, y, me divertí tanto que, lo mismo sigo... la ciudad, no me digas, tiene como muchos alicientes para estar por aquí y por allá con Oscar Wilde y Edgar Allan Poe ¿a que sí?
Me ha encantao tu comentario, corazón.
Un besote bien gordito y sonoro
FRANCISCO J. CAPARRÓS, bienvenidísimo a este blog compartido... todo un honor para mí, porque francamente, eres un maestro, tanto cuando evocas y transmites tus sensaciones sobre Madrid, como cuando dibujas una escena de la vida de los Schmidt, muchas, muchas gracias por venir y quedarte.
ResponderEliminarUn beso enorme.
Qué bien, me has hecho soñar despierta...!!!
ResponderEliminarPues yo me pido una cena con Victor Hugo, ea!
Mil besos!
Bonsoir Apm,
ResponderEliminarJe te remercie pour ton adorable commentaire!!
Ton français est vraiment très correcte!
Tu as la chance de te faire comprendre, mais moi, je me sens diminuée de ne pas pouvoir te lire... Désolée
Douce nuit et jolis rêves
Hmmmm Alice ... la próxima vez no olvides llamarme, me apunto. He recreado perfectamente el momento y he querido abrazarles y abrazarte! Muacc
ResponderEliminarMERCEDES, millonazo de gracias por el comentario... yo también te acompaño supergustosa a esa cenita con Víctor Hugo... !la de cosas que hablar con él!, desde luego, otra cena más que prometedora, sin duda alguna!!!
ResponderEliminarUn besote bien gordo y sonoro
KENZA Bonjour!
ResponderEliminarJe suis très heureux de lire votre aimable commentaire et m´a encouragé de votre soutien pour mon français. La verité est que j´aime vraiment cette langue que je pense, est extrêmement doux et gentil, très mélodieuse et belle... s´il vous plaît, ne vous sentez pas désolée par ne peuvent pas me lire, dans mon post, j´ecrire des histoires courtes inventées, dans ce post:
je décris un dîner dans un restaurant populaire à Seville que les convives ne sont pas plus et pas moins de Oscar Wilde, Edgar Allan Poe et moi-même... qu´ils sont morts, est d´être aussi insignifiante au regard de l´agitation de nerfs que j´ai pour un dîner comme celui-ci, imaginez!... et si au moins ils étaient Rimbaud et Baudelaire, par exemple, même je pouvais parler avec un peu d´aisance, parce que mon anglais est très primitive... mais, il s´avère que quand je viens au restaurant, toute nervieuse et effrayée à la mort, je me trouve les deux parlant avec animation, et personne dans le restaurant semble de s´émerveiller devant le fait que le dîner serait là à attendre pour Oscar Wilde et Poe.
Kenza cher, j´aime écrire et lire, j´aime aussi beaucoup la peinture, mais je ne peins pas, et je suis une amoreuse du théâtre et du français, que j´etudie pour le plaisir.
Un gros bisou et merci beaucoup
MELA, millonazo de gracias por el comentario, reina... decidido, la próxima vez te aviso y vamos las dos, !claro que sí!... ¿y, cómo no abrazarles, y abrazarte con un tiernísimo achuchón a rebosar de cariño?, !pues claro!
ResponderEliminarUn besote la mar de enormísimooooooo
¿ Qué tal estás? espero que tolerando el calor un poquito... Te cuento,a mí también me parece muy muy interesante una cena con nuestros escritores preferidos... Yo también estaría nerviosa pero un secretillo ahora bajito...A mí me encantaría cenar con Juan Ramón Jiménez y con Miguel Delibes dos autores que han marcado mi adolescencia y que aún les sigo leyendo...Y, además, me gustaría que el lugar fuera emblemático y con la atmósfera de la época... ¿ Te apuntas a la cena?... Como siempre, tu relato me mantiene atenta hasta llegar al final. Un abrazo grandote y que tengas un estupendo fin de semana.
ResponderEliminarANGELA, millonazo de gracias por tu comentario !que me ha encantao!, de veras... ¿como no me voy a apuntar a una cena con Juan Ramón y con Delibes?, !que maravilla!, dos escritores emblemáticos y maravillosos... a Juan Ramón, casi paisano (Moguer está a escasos ochenta kilómetros de Sevilla) le adoro, y por Miguel Delibes siempre tuve fascinación desde la primera vez que lo leí en mi adolescencia, cuando estaba en el instituto. Dicen, que los autores que lees en tu adolescencia te marcan para siempre, y -como pasa la primera vez que vas al teatro-, o te enamoras de sus obras, o te resultan muy cuesta arriba y no los vuelves a leer, no hay término medio... a mí, me gustaron a rabiar Delibes y Juan Ramón ¿cómo no apuntarme, chiquilla? ¿cómo no?
ResponderEliminarUn besote enormísimo... y, tienes razón, medio derretios estamos ya, desde el lunes pasado superando los 40ºC... !el verano es francamente tórrido en Sevilla, no sabes cuanto me gustaría tener la temperatura por ejemplo de Gijón... y en vez del Guadalquivir, el Cantábrico ¿a que sería chulo la Torre del Oro a la vera del Cantábrico?!!!
A la hora de soñar si que no te andas con chiquitas! Hermosa cita has tenido y muy bien narrada, felicitaciones!
ResponderEliminarYo me hubiera sentido igual y absolutamente impactada. ¡Vive Dios!
ResponderEliminarUna cena literaria de esa magnitud amerita que... ¡continúes con la historia! ¿Qué pasó durante y después de ella? ¿Eh? ¿Acaso alguno de ellos te susurró su secreto para ser tan magnífico? El pueblo quiere saber (por lo menos yo).
Fantástico relato, apm, pa morirse amorosa. Voy a esperar el to be continued...
Besazos de todos los tamaño y colores :)
(Estoy con muchííííísimo trabajo, pero cuando tengo un minutín, acá estoy, bien firme al pie del cañón, apm)
CRIS, muchísimas gracias por el comentario, corazón... la verdad es que sí, -que como diría José Mota- si hay que soñar se sueña, porque total, soñar pa ná, tampoco, ja,ja,ja,ja.
ResponderEliminarUn besote, ya sabes, de los supergordos y sonoros
LILI, millonazo de gracias por el comentario, reina... pues, yo diría que después de la cenita, lo mejor, un paseito pa bajar tan ricos manjares... por los alrededores tenemos: la Real Fábrica de Tabacos ya sabes, donde se desarrolla la trama de Carmen (hoy Facultad de Letras), la Torre del Oro mirándose en el río, el Archivo de Indias, la Catedral y el barrio de Santa Cruz, vamos, un lujazo de paseito, no se me pueden quejar... y, antes de irnos pa casa, -como mandan los cánones sevillanos-, unos calentitos con chocolate... ja,ja,ja,ja,
ResponderEliminarLa verdad es que la historia es como pa continuarla ¿y, como me las maravillaría yo pa explicarles lo del universo bloguero, y que resulta que son ni más ni menos que mi entrada?
Un besote Lili, ya sabes, la mar de gordísimooooooo
PILAR GARCIA, bienvenidísima a este blog que es compartido Pilar, encantada de tenerte aquí, muchísimas gracias.
ResponderEliminarUn besote bien gordo y sonoro