Sevilla en verano, perjudica seriamente a la salud

Queridos bloguer@s, aún no ha comenzado oficialmente el verano pero en Sevilla ya hace un calor de la leche....a 41ºC he llegado a ver los paneles informativos que andan colocados por toda la ciudad y que además de pisos, jamones, coches y demás zarandajas anunciadoras, te dan la hora y la temperatura.

Y me diréis, !bueno, ya esteréis acostumbrados!, pues no queridos, a ésto no se acostumbra el cuerpo humano..... si hasta a los ordenadores se les va la pinza (virtual, claro) y con los calores se desprograman. Sevilla es preciosa, de veras, pero, de junio a septiembre (incluidos) perjudica seriamente a la salud, a la humana y a la robótica !uf, que jartura de calor!

Por las noches, la temperatura no baja de los 24ºC, lo que, no favorece el dormir, desde luego, aunque -como no hay mal que por bien no venga-, si favorece el soñar despierto. En esta tesitura andaba yo anoche, a vueltas con la almohada y con los 24 grados, cuando, con los ojos como platos tuve un sueño.......

Resulta queridos, que por esas extrañas razones de la onírica, mi cuerpo, mi cama, mi mesilla de noche y hasta mi casa, se transmutaban de acá para allá en sintonía con la climatología más favorable. Y, transmuta-transmutandi, de diciembre a febrero me encontraba así, transmutadita yo y todos mis enseres, en Buenos Aires, disfrutando como una reina de los findes, de las noches y de los días: ahora vamos a irnos a ver las cataratas del Iguazú, a Patagonia, a Tierra del Fuego, al Perito Moreno... este finde, no voy a salir fuera, mira, me quedaré aquí paseando por Recoleta y Palermo, y por la noche de tangos en La Boca.

Terminado febrero, y de marzo a mayo, me transmutaba a Sevilla y, disfrutaba de la Semana Santa, la Feria, y de los paseos por las calles preñadas del perfume de azahar de los naranjos en flor. Terminado mayo, transmuta que te transmuta aparecía en Canarias de junio a agosto: la playita, las papas con mojo picón, otra vez la playita, las pelotas de gofio con morcillas dulces, y la playita, paseos y paseos a la vera del mar... !días de vino y rosas, no os digo más, querid@s!.

Terminado agosto, bronceadita y relajada, volvía a transmutar de septiembre a noviembre, esta vez a México: ahora me voy a Cancun, ahora a la Feria del Libro de Guadalajara, ahora me quedo en el DF, de tiendas por la Colonia San Ángel y tomando chocolate en el touch de la Plaza Loreto. En diciembre, vuelta a empezar: Buenos Aires.

Sí, ya se queridos, era un sueño, pero !que hermoso sueño, no me digáis!, tan hermoso, que esta noche me propongo volverlo a soñar, porque, se dice por ahí, se comenta, se rumorea por la gente, e incluso se relata en libros que, a fuerza de soñar y desear algo, ésto, termina por hacerse realidad.

Querid@s os dejo, la foto de la entrada: el cartel de la magnifica Matar a un Ruiseñor, que, como sabéis, transcurre en un tórrido verano de Alabama. Y el vídeo, un maravilloso brindis a la naturaleza a la que cada vez maltratamos más....no es el cambio climático ni el calentamiento global los que atenazan, es la mano del hombre, la nuestra.....sed felices queridos, por favor, felices y respetuosos con la naturaleza, no es un secreto, es nuestra obligación y debe ser nuestro compromiso. Besitos, muchos besitos.